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martes, 22 de noviembre de 2011

POESÍAS y DEMÁS PARA EL DÍA DEL MAESTRO

Mi profe me cuida,
me quiere de verdad,
así en el cole
yo tengo otra mamá.
Hoy es su santo
y la quiero felicitar.
¡Felicidades seño!
Un beso te quiero dar.




Maestro tu sabiduría lo es todo
tu bondad es infinita
la enseñanza es a tu modo
y de seguro es muy bonita.

Tu enseñas al ignorante
al que te pide enseñanza
aunque sea algún vagante
que tiene alguna esperanza.

Tu no haces diferencia
entre el rico y el pobre
tu quieres darle la herencia
de que escriba su nombre.

Tu que nos enseñaste
que nos diste tu amistad
tu que nos respetaste
con una gran igualdad.

Hoy que por fin terminamos
lo tenemos que dejar
nos vamos con una herida
no lo vamos a olvidar.

Lo llegamos a querer
como a un segundo padre
usted nos vio crecer
y fue algo inolvidable.

Colaboración de Ama2005
México







Fuente: Blog "Mi rinconcito de la infancia"

Enseñaras a volar
pero no volaran tu vuelo
Enseñaras a soñar
pero no soñaran tu sueño
Enseñaras a vivir
pero no viviran tu vida...
pero sabras que cada vez que ellos
vuelen ,piensen,sueñen,canten,vivan,
estara lo sencillo del camino
enseñado y aprendido .

Madre Teresa de Calcuta

A LA MAESTRA

Es en la escuela otra madre
que orienta con sus consejos;
es experta sembradora
de nobles conocimientos;
es mano suave que guía
y es luz que alumbra senderos.
Es, en suma, la maestra,
manojo cálido y tierno
de bondadosa paciencia
y de maternal afecto.
A LA MAESTRA
 
Publio A. Cordero



Poesías de Otoño

POESÍA DE OTOÑO
 
Los árboles de mi calle
se están poniendo dorados,
el otoño de otros años
ha vuelto y los ha pintado.

Pronto caerán sus hojas
y el viento las llevará,
y cuando acabe el otoño
ni una hoja quedará.






ADIVINANZAS INFANTILES

Llevo dinero y no soy banquero, 
papel o metal, 
                            lo que sea me da igual.                                         
                                                                                                        
La solución es: La cartera 
                                                                                               
 
Te la digo y no me entiendes                                               
te la repito y no me comprendes.

La solución es: La tela
Todos me quieren para descansar
¡¡si ya te lo he dicho!!
no pienses más.

La solución es: La silla